jueves, 29 de noviembre de 2007

Apuntes de Métrica (1 de 3). Páginas de consulta. Materiales para el Comentario de Textos.



Páginas de un manuscrito del Libro de Buen Amor del Arcipreste de Hita.


MÉTRICA

0. DEFINICIÓN

La métrica es la ciencia que tiene por objeto el estudio de las propiedades rítmicas de los versos: cómputo silábico, distribución acentual, rima y agrupación en estrofas y composiciones poéticas.

1. CÓMPUTO SILÁBICO

Para medir los versos en español, simplemente habremos de contar -en un principio- sus sílabas naturales. Así, por ejemplo, el verso

Verde vecino de la verde selva

Esteban Manuel de Villegas

se mediría así:

Ver-de-ve-ci-no-de-la-ver-de-sel-va (11)

Como habrás observado, cuenta con 11 sílabas. Al verso de 11 sílabas lo denominamos endecasílabo.

Pero esta norma tan fácil tiene sus excepciones. En primer lugar, tendremos en cuenta la regla del acento de intensidad en la última palabra del verso.










Recuerda:

Las palabras agudas presentan el acento de intensidad en la última sílaba:

Cla-vel, a-lu-vión, so-

Las palabras llanas llevan el acento de intensidad en la penúltima sílaba:

Co-me-ta, di-jis-teis, -pez

Las palabras esdrújulas muestran el acento de intensidad en la antepenúltima sílaba:

Lám-pa-ra, cán-ca-mo, pín-ta-lo









Pues bien, si un verso termina en una palabra llana, se cuentan sencillamente sus sílabas naturales:

Oh dulces prendas, por mi mal halladas

Garcilaso de la Vega

Oh-dul-ces-pren-das-por-mi-mal-ha-lla-das (11)

Hemos contado 11 sílabas naturales. Como la última palabra del verso -halladas- es llana, se mantiene el mismo número de sílabas.

Los versos, siguiendo una tendencia general en la entonación de la lengua española, son, en su mayoría, llanos.

En el caso de que la última palabra del verso sea aguda, se produce un alargamiento en la entonación que da lugar a una sílaba más de las que contaríamos en un principio:

¡Sé más feliz que yo!

Luis Arolas

Los monosílabos, a efectos métricos, equivalen a palabras agudas. Por lo tanto, la última palabra del verso -"yo"- se cuenta como aguda.

Sus 6 sílabas naturales se transformarán en 7 sílabas métricas. Veamos:

¡Sé-más-fe-liz-que-yo! (6+1=7)

En el caso -menos probable- de que la última palabra del verso sea esdrújula, se produce una asimilación silábica que da lugar a una sílaba menos en el cómputo:

la luz, las vegas, el mar Océano

Amado Nervo

Sus 11 sílabas naturales se transforman en 10 sílabas métricas:

la-luz-las-ve-gas-el-mar-O-cé-a-no (11-1=10)

2. LICENCIAS MÉTRICAS

Se denominan así otros fenómenos que determinan el cómputo silábico. Pueden darse entre palabras contiguas o en el interior de una palabra.

2.1. LICENCIAS MÉTRICAS ENTRE PALABRAS CONTIGUAS.

2.1.1 SINALEFA

Cuando en el interior de un verso una palabra termina en vocal y la palabra siguiente empieza también por vocal, las dos sílabas a las que pertenecen se unen en una sola:

el vago apunte añil

A. M. G. López

Observa cómo puede medirse:

el-va-go_a-pun-te_a-ñil (6+1=7)

Entre vago y apunte se ha producido una sinalefa. También, entre apunte y añil. Además, por ser añil una palabra aguda, se cuenta una séptima sílaba.

2.1.2 HIATO MÉTRICO

Cuando el ritmo y la entonación no permiten que se produzca la sinalefa, estamos en presencia del hiato métrico (no debes confundirlo con el hiato que se produce en el interior de una misma palabra).

Observemos un ejemplo de Quevedo. El poeta, en su epístola [= carta, sobre todo si está en verso] contra el Conde-Duque de Olivares, habla de cómo actuarían las mujeres en los tiempos caballerescos, que consideraba irremisiblemente perdidos:

Acompañaba al lado del marido
más veces en la hueste [=ejército] que en la cama,
sano le aventuró [=lo arriesgó, lo dio a la aventura, a la guerra], vengóle herido.

Fijémonos en el segundo verso:

más veces en la hueste que en la cama

Su medida quedaría así:

más-ve-ces-en-la-hues-te-que_en-la-ca-ma (11)

No ha podido hacerse la sinalefa entre la y hueste, porque "hues" es la sílaba tónica de la segunda palabra.

Entre "que" y "en" no ha habido ningún problema para establecer la sinalefa.

Es importante que tengas muy en cuenta que la presencia de una h o de una coma no impiden la realización de los fenómenos estudiados.

2.2 LICENCIAS MÉTRICAS EN EL INTERIOR DE UNA MISMA PALABRA

Son fenómenos mucho menos frecuentes que la sinalefa y el hiato métrico.

2.2.1 DIÉRESIS

Consiste en romper un diptongo y transformarlo en un hiato, dando lugar a dos sílabas diferentes (¡siempre en el interior de una palabra!).

Pongamos como ejemplo este fragmento de Bécquer:

Tu pupila es azul, y cuando ríes,
su claridad süave me recuerda
el último fulgor de la mañana
que en el mar se refleja.


Si tomamos en consideración el segundo verso, tendría, a primera vista, 10 sílabas; pero no es así: el diptongo "ua" de suave ha de partirse y considerarse como un hiato:

su-cla-ri-dad-sü-a-ve-me -re-cuer-da (11)

La diéresis (¨) sobre la vocal cerrada indica que se ha roto el diptongo y se ha formado un hiato.

2.2.2 SINÉRESIS

Fenómeno contrario a la diéresis. Consiste, pues, en fundir las vocales de un hiato de forma que se obtenga al final una sola sílaba (perdona mi insistencia: tanto la diéresis como la sinéresis tienen lugar siempre dentro de una misma palabra).

Observémoslo en este fragmento del poema que Manuel Reina, uno de los precursores del Modernismo, dedica a Jorge Manrique; tiene la peculiaridad de estar escrito en coplas de pie quebrado, llamadas también estrofas manriqueñas:

Nave de mi fantasía,
tu casco por cristalino
mar resbala

y al soplo de la poesía
despliega tu blanco lino
como un ala.


Detengámonos en el cuarto verso:

y al soplo de la poesía

Así quedaría el cómputo silábico:

y_al-so-plo-de-la-poe-sí-a (8)

Advierte cómo, por medio de la sinéresis, hemos unido en una sola sílaba el hiato "oe" de poesía.

3. LA RIMA

En una estrofa o serie de versos, la rima consiste en la repetición total o parcial de los fonemas que aparecen a partir de la última vocal acentuada. Comprobémoslo en este fragmento de José Martí:

Yo soy un hombre sincéro
de donde crece la pálma
y antes de morirme quiéro
echar mis versos del álma.


(Las tildes que aparecen sirven sólo para destacar la última vocal acentuada de cada verso; no poseen valor ortográfico)

3.1. CLASES DE RIMA

3.1.1 POR SU TIMBRE

3.1.1.1 RIMA CONSONANTE

Se produce cuando la coincidencia de fonemas a partir de la última sílaba acentuada es total, como en el ejemplo anterior.

Veamos otro:

Moza tan fermosa
non vi en la frontera,
como una vaquera
de la Finojosa.


Marqués de Santillana

3.1.1.2 RIMA ASONANTE

La rima asonante se produce cuando sólo riman los fonemas vocálicos a partir de la última vocal acentuada:

Si la ves le das memórias*.
Y dile que si se acuerda
de cuando ella era mi nóvia.


Popular (Soleá de Triana)






* Memorias: recuerdos.





3.1.1.2.1 ALGUNOS CASOS PARTICULARES DE LA RIMA ASONANTE

Con respecto a la rima asonante, pueden producirse en el análisis métrico dudas, confusiones o errores. Tratemos de evitarlos estudiando algunos ejemplos particulares.

3.1.1.2.1.1 RIMA ASONANTE ENTRE PALABRAS LLANAS Y ESDRÚJULAS

No era nada, era una rosa
haciendo feliz a un tállo,
un pájaro que va y viene
soñando que él es un pájaro,
una piedra, lenta flor
que le ha costado a la Tierra
un esmero de mil años.


Pedro Salinas

Observa cómo, en los finales de los versos subrayados sólo riman el fonema "a" y el fonema "o" de "tallo" con el primer fonema "a" y el fonema "o" de pájaro. Recuerda que en los versos esdrújulos se asimilaba las penúltima sílaba y se contaba, por lo tanto, una sílaba menos. Por ello, y aunque "pájaro" presente dos aes, sólo se tiene en cuenta la primera para analizar y describir la rima asonante.

3.1.1.2.1.2 RIMA ASONANTE ENTRE UNA VOCAL ABIERTA Y UN DIPTONGO

Observemos este ejemplo de Francisco Villaespesa:

¡Mano de marfil antiguo,
mano de ensueño y nostalgia,
hecha con rayos de luna
y palideces de nácar!


Podemos apreciar cómo el diptongo "ia" de "nostalgia" ocupa la misma posición que el último fonema "a" de "nácar". Sólo riman las dos aes, que constituyen los núcleos de ambas sílabas. La vocal "i", cerrada, que está fuera del núcleo, no rima.

3.1.2 POR SU CANTIDAD

3.1.2.1 RIMA AGUDA

La que se establece entre versos oxítonos o agudos.

¿Adónde el camino irá?
Yo voy cantando, viajero,
a lo largo del sendero...
-La tarde cayendo está-.


Antonio Machado

3.1.2.2 RIMA LLANA

La que se produce entre versos paroxítonos o llanos.

Con rima consonante:

Cultivo una rosa blanca,
en julio como en enero,
para el amigo sincero
que me da su mano franca.


Y para el cruel que me arranca
el corazón con que vivo,
cardo ni oruga cultivo:
cultivo la rosa blanca.


José Martí

Con rima asonante:

Del salón en el ángulo oscuro,
de su dueño tal vez olvidada,
silenciosa y cubierta de polvo
veíase el arpa.


Gustavo Adolfo Bécquer

3.1.2.3 RIMA ESDRÚJULA

Se produce cuando riman entre sí versos proparoxítonos o esdrújulos:

¡Oh, quien fuera hipsipila* que dejó la crisálida**!
(La princesa está triste. La princesa está pálida)


Rubén Darío





* Hipsipila: Cierta clase de mariposa.
** Crisálida: Ninfa o capullo de los insectos de metamorfosis completa, como la mariposa.







3.1.3 POR SU COMBINACIÓN AL FORMAR ESTROFAS

3.1.3.1 RIMA CONTINUA

Serie de rimas iguales:

Con sayal de amarguras, de la vida romero,
topé tras luenga andanza con la paz de un sendero.
Fenecía del día el resplandor postrero.
En la cima de un álamo sollozaba un jilguero.


Ramón Pérez de Ayala

3.1.3.2 RIMA GEMELA

Por medio de la rima gemela, dos versos se unen formando un pareado:

Las hijas de las madres que amé tanto
me besan ya como se besa a un santo.


Ramón de Campoamor

3.1.3.3 RIMA ABRAZADA

Presenta la siguiente estructura: dos versos de rima gemela enmarcados por otros dos igualmente gemelos:

Cruzábamos lentamente
las calles llenas de luna
y el hambre bailaba una
zarabanda en nuestra mente.


Emilio Carrère

3.1.3.4 RIMA ALTERNA

Riman entre sí tanto los pares como los impares:

Pienso en ella tristemente,
y sobre el papel la pluma
se desliza suavemente
ante el paisaje de bruma*.


Juan Ramón Jiménez





* Bruma: neblina.







3.1.3.5 RIMA ENCADENADA

La rima propia de una estrofa se va entrecruzando con la rima de la estrofa que sigue, y así sucesivamente. Son muy característicos de este tipo de rima los tercetos encadenados:

¡Oh los yelos del sur! ¡Oh las polares 11 A
islas del norte! ¡Blanca primavera, 11 B
desnuda y yerta sobre los glaciares, 11 A

cuerpo de roca y alma de vidriera! 11 B
¡Oh estío tropical, rojo, abrasado, 11 C
bajo el plumero azul de la palmera! 11 B

Rafael Alberti

(El esquema estrófico guarda relación con el fragmento escogido, y no con el poema entero.)







© Agustín María García López. Departamento de Lengua y Literatura Españolas.